Uruguay, sin fronteras en comunicación

Entre los tantos pendientes para realizar el viaje a Montevideo, Uruguay, para asistir a la Cumbre Internacional de Comunicación Digital -WECOMM- estaba hacer una revisión de los sitios interesantes de la ciudad y las características que me permitieran ubicarme en los días que estaría ahí. Dónde y qué comer, qué visitar, lugares ineludibles en los recorridos, traslados en la ciudad y conectividad. En especial, esta última.

Hice lo propio escuchando algunos videos de youtubers viajeros sobre su percepción de la ciudad y la constante fue la amabilidad de la gente y la conectividad. De entrada, ya estaba a la expectativa que fuera así. El viaje de Colombia a Uruguay fue por Bogotá y Lima, así que llegamos al día siguiente de la salida de Barranquilla. El transbordo por Lima nos regaló un atardecer sin igual, el sol escondiéndose en el horizonte del océano, en la única ciudad capital de país suramericano de cara a las costas del mar. 

Conectividad sin fronteras

Por donde vayas y a donde vayas encontrarás un "hablador" o aviso con el nombre de red y clave para que te conectes a wifi. No hubo lugar donde no encontrara el servicio, desde Montevideo hasta Punta del Este. Una delicia visitar otro país y siempre estar conectado, en especial para aquellos cuyo trabajo es 24/7. Sitio público o no, tienes la posibilidad de poder comunicarte, compartir y conversar con los tuyos, de forma gratuita, como si estuvieras en la misma ciudad ,es algo que no tiene precio. 

Gastronomía sin fronteras históricas

Chivito en Clyde´s, Montevideo.

Comienzo por el café, el que siempre extrañaba al salir de Colombia. Puedo decir que es el primer lugar en el que no extrañe el sabor y el aroma, si bien no es como el colombiano, les aseguro que es delicioso. Para desayunar, hay que llegar a La Pasiva, un sitio tan tradicional como agradable que no olvidarás por sus Panchos a la panceta y la delicia de mostaza cuyo sabor solo encontrarás en Montevideo en uno de sus tantos puntos en la ciudad. Para almorzar, hay que llegar al Mercado del Puerto, de entrada las artesanías y hacia adentro todo lo que te puedas imaginas en una parrilla. De ahí no puedes salir sin haber probado la morcilla, en especial morcilla dulce y los chinchulines. Un buen cierre de día puede ser con un chivito en Clyde's, en Carrasco, es una réplica exacta del que existe en Washington, con comida rápida y decoración mayoritariamente en madera. Y como postre, el chajá, cuya existencia es casi centenaria y receta propiedad de una familia cuyo legado pasa de generación en generación. El mensaje que transmite Uruguay con su gastronomía es historia y tradición sin fronteras.

Panorámica de Montevideo desde Piso 40

La Gente sin límite de amabilidad

Lo encontré entre los comentarios más recomendados y lo comprobé. La amabilidad a flor de piel, si los hay de mal genio o con mal día, pues no me los tropecé, afortunadamente. La disposición a conversar o ayudar y el buen humor parecen llevarlo en la genética. Desde que se pisa el aeropuerto, el taxista que te habla hasta de las consecuencias del Cambio Climático, quien te ofrece su casa para que esperes la hora de entrada al hotel por la madrugada y luego te hace un tour por toda la ciudad, hasta quien con buen humor siempre te convence con su servicio o producto o te comprende que todo en Uruguay te parezca carísimo y te busca la mejor opción sin dejar de llevarte la mejor impresión de su país y su gente.

"La Mano", Punta del Este, Uruguay

Montevideo te hace sentir que ese es el ideal de ciudad que mereces, con el horizonte despejado hacia el Río de la Plata desde cualquier punto o calle, con grandes espacios verdes y públicos para caminar, correr, disfrutar a cualquier hora del día, las ramblas impecables y limpias sin lugar a basuras, monumentos visibles y respetados, conciencia ciudadana a flor de piel. No dudo que tanto el país como la ciudad puede tener dificultades económicas y situaciones sociales por mejorar, es apenas normal, su percepción desde adentro no es tan buen como la de esta visitante. Pero puedo asegurar que es un país sin fronteras para comunicar los grandes tesoros que les tocó en el planeta con el Río de la Plata, la playa de Punta del Este y el mar que golpea las rocas en Punta Ballena.