Trabajo desde casa o teletrabajo en tiempos de COVID19

Ante las medidas estrictas que se veían venir para enfrentar el coronavirus y la posibilidad de entrar en cuarentena, en América Latina y Colombia,  dos expresiones se abrieron camino como solución a la comunicación y a mantener la actividad productiva: Teletrabajo y trabajo desde casa. Quiero contarles que esta opción no es nada nueva. Todos los que nacimos en los años 70 estamos marcados por ese concepto que surgió por primera vez gracias al físico estadounidense Jack Nilles en 1973, cuando en plena crisis del petróleo de esa década se buscaba una solución para reducir el consumo de combustible producido en los traslados desde el hogar al lugar de trabajo y viceversa. La propuesta fue sencilla "llevar el trabajo al trabajador y no el trabajador al trabajo". Pero solo con la revolución que ha significado la puesta en marcha de las TIC para la cotidianidad del ser humano empezamos a entender de qué se trataba esto.

Hace 10 años atrás tomé la decisión de dejar de ser empleada y convertirme en independiente. Confiando no solo en mi historia laboral sino también en las ventajas que encontraba en desarrollar estrategias de comunicación para las organizaciones basadas en las nuevas herramientas tecnológicas. Así que yo NO me sentía desempleada, sino teletrabajando; con la dificultad que mi sentir difería de cómo me veían los demás. Y así duré varios años, nadando contra la corriente, pero ese tiempo lo invertí aprendiendo y aprovechando los inicios del Ministerio de las TIC en Colombia. En medio de la crisis económica que empezó a golpear mi hogar, por la decisión, se reafirmaba cada vez el camino elegido. Así que cursé dos programas virtuales con MinTIC y la Universidad de Antioquia para la Gestión de medios online y Community Management para periodistas. Más que el conocimiento académico, creo que lo que mejor fue que aprendí : disciplina, rigor y cumplimiento para teletrabajar. Ah! y algo más! pbtuve el chip mental que me acercó a la generación nativa digital que tiene nombre propio: hakuna matata, todo tiene solución. 

Ese fue mi mejor entrenamiento para seguir con la “necedad” que en una ocasión mi mamá definió como: “El trabajo ese que te inventaste”. Era lógico sin la formalidad ni aceptación laboral ni social, un teletrabajador es un trabajador independiente que no tiene ningún respaldo ni garantía y mucho menos estatus frente a los demás. Recuerdo que antes de renunciar a mi empleo le pregunté a una amiga: “Como independiente, si mi casa es mi oficina, ¿cómo organizo mi tiempo, cómo manejo salud, pensión?¿tu tienes un espacio adecuado como oficina?. Ella solo me dijo: “¡Es tu momento, puedes hacerlo!”. Me motivó pero no me dijo el cómo, eso lo fuí descubriendo con el paso de los años.

John Moravec, investigador y pedagogo, vinculado a la Universidad de Minnessota en el 2011, le dió nombre al futuro del trabajo y definió el concepto "knowmad", que no es otra cosa que el perfil del teletrabajador, del trabajador independiente actual o de quien hace su trabajo en forma remota o desde casa. Con las TIC estamos haciendo frente a nuevos contextos que influyen y cambian conforme la tecnología. Entonces con los años, la tecnología y la experiencia diaria se ha ido esculpiendo un nuevo perfil de trabajador. Una persona que se caracterizado por talento para imaginar, su capacidad de innovación, su interés por el trabajo colaborativo y su resistencia a un mundo plagado de incertidumbres. 

Mientras hoy todos están preocupados por cómo sobrellevar los días de cuarentena en casa, que aunque el decreto presidencial ponga una fecha, a ciencia cierta no sabemos cuánto se pueda extender en tiempo, quiero dejarles tres lecciones aprendidas como teletrabajadora por decisión:

• Usen este tiempo para aprender algo nuevo relacionado con las nuevas tecnologías, pero sin estrés. Disfrútenlo, si tienen nativos digitales en casa, no se preocupen si los papeles de maestro-alumno se invierten a la hora de descubrir aplicaciones, rutas de navegación y hasta juegos.
• No pretendan actuar en casa como si estuvieran en oficina. Es cierto que es conveniente tener un lugar cómodo e iluminado, así como tener la rutina de baño y aseo personal, pero necesitas aprender a manejar tu tiempo y ser eficiente en ese tiempo. Tu familia la tienes contigo, está esperando por ti y estás en casa, nada justifica que no puedas dedicarle tiempo. Responsabilízate de labores de hogar y compártelas con alegría, das ejemplo a los tuyos y cambias de actividad además de estar frente al computador o con el móvil en la mano.
• Eviten hacer del trabajo en casa una broma, tómenlo en serio. Es la oportunidad para demostrar que la productividad no está en las ocho horas "nalga", marcar tarjeta y esperar ser el mejor porque mantiene contento al jefe llegando más temprano o siendo el último que se va, es sinónimo de trabajo. Como tampoco que no hay espacio para desayunar, almorzar, comer y dormir tranquilos.

En mi opinión, ese perfil siempre ha existido, la diferencia hoy, año 2020, por la crisis mundial y la emergencia sanitaria con el coronavirus, el pre concepto de lo que es trabajo, trabajador, empleo, empleador se asumió como única salida. Cuando superemos la pandemia, y debemos tener fe en ello como todo ciclo que inicia y termina o cambia, el perfil del trabajador habrá cambiado. No nos sentiremos empleados o desempleados, sino trabajadores y emprendedores  todos. Entonces no habrá más excusas de los gobiernos, ni de las empresas en el sector público y el sector privado a reglamentar con todas las garantías el teletrabajo o trabajo remoto, que no trabajo desde casa, porque todas las herramientas están en la nube y el sitio puede ser la casa, la calle, otro país, un sitio de espacios colaborativos, en fin.

Ser "Knowmad" o trabajar de forma remota o teletrabajar define a cómo asumimos el trabajo en nuestro presente y evoluciona hacia el futuro. Una persona knowmad no necesita un horario fijo o espacio físico para aportar valor, lo logra con su conocimiento y sentido de responsabilidad para desarrollar la labor asignada. Si existe un problema o situación, se crea un escenario físico o virtual ( en eso no hay barreras geográficas) y se ponen en modo CO: colaborar, co-crear, compartir y conocimiento, en especial esta última que es en la que tienen más fortaleza.

Algo cambia en el espíritu del ser humano trabajador, que lo hace por vocación y no solo por el empleo, tiene el sello de la creatividad, la innovación, el aprendizaje permanente, facilitar el trabajo colaborativo y estar siempre motivado. 

Todo momento de crisis que enfrentamos en la vida y como humanidad nos da la oportunidad de construir, cambiar, descubrir más de nosotros mismos. La que vivimos a causa de la cuarentena por el coronavirus nos está llevando por un nuevo aprendizaje y una nueva oportunidad de crecimiento. Claro que da un poco de miedo,incertidumbre y mucha expectativa el tema de trabajar en casa. Pero desde mi experiencia personal, les comparto que nos queda el hábito de ser responsable de las tareas y llevarlas a término de forma profesional y con toda la pasión que sientes por tu trabajo, no por tu empleo. Eso conllevará a nuevas experiencias, nuevas oportunidades y proyectos.